Los otros; la clave está en “ Los otros”

 

Casi nadie habla de ellos pero siempre están ahí y pueden ser decisivos.

De su reacción puede depender todo aunque a nadie le guste hablar de ellos.

Ojos de hiel

 Dijo que no quería hablar. Aunque se le notaba en la mirada que estaba haciendo un esfuerzo de contención enorme.

Sus ojos delataban tristeza y rabia. No sabría decir cuánto tiempo iba a aguantar sin hablar, antes de que el malestar y la injusticia supurasen por sus poros.

Se le notaba en la mirada que quería hablar aunque no podía. Son las intuiciones que a veces nos da nuestro oficio. 

No iba a tardar en hablar. La última palabra aún no estaba dicha.

No es sólo Déborah

 Con el cierre del caso no sólo queda sin justicia Déborah; queda en cuestión el sistema. Quién tiene o destruyó la tarjeta del móvil? Quién dañó el ordenador? Quién perdió tantos papeles y quién obstinadamente insiste en una muerte natural cuando todo apunta a lo contrario. Y es que a veces da miedo vivir en este país y que a alguien de nuestro entorno le pase algo como esto!!

Creemos en lo imposible

 Y yo por ahora tengo pendientes dos milagros: uno tendría que ser el próximo domingo y otro antes de fin de mes.

Empezar de novo

 Comecemos de novo coa mirada limpa. Agora que sabemos tantas cousas.

Sálvora ten un mozo que traballa na Arxentina no peixe, na empresa de papá. Ten unha vivenda de solteiro nunha das mellores urbanizacións de Vigo, fronte ó salón de pleiteados Cari. Estána decorando e amoboándoa xuntos. Máis ela ca el porque dispón de máis tempo e tamén das súas tarxetas bancarias.

Ás veces é brusco e pesado como aquela vez que lle chamou trinta e pico de veces no mesmo día, aínda que ela non lle collera.

La V de D; suspensión temporal

 Fue muy duro tomar aquella decisión pero tuvieron que hacerlo. Ya no podían más.

En el fondo era sentir como si la hubiesen vuelto a dejar en aquella cuneta donde la echaron las personas contratadas por el asesino

La V de D; un muro

Decía Nacho que no se puede derribar un muro con bolas de papel y tiene razón. Había un halo de protección sobre el imputado que iba más allá de la presunción de inocencia.

Pero la justicia debería proteger a los más vulnerables y enmendar los múltiples errores y desidias de este caso.

Yo creo que aún hay partido y lo vamos a jugar…Y que se sepa también quién está siempre fuera de juego cuando se busca la justicia y la verdad!