La plantación

La plantación trabaja a destajo de sol a sol. Cualquiera puede hacer cualquier cosa que pidan los dueños o incluso el servicio del cortijo principal; llaman y ordenan con ínfulas: soy el coordinador y cualquiera de cualquier plantación tiene que hacer cualquier cosa que yo diga. El capataz de la plantación ejerce como represor, controlador y reforzador de órdenes de los jefes y pequeños sicarios de la hacienda principal. Aquí lo de menos es qué se comercializa o con qué se trafica. Los miembros de la plantación trabajan, los sicarios cobran y los jefes de la hacienda principal miran por la ventana mientras los demás trabajan para ellos.