Hoy voy a hablar de nosotros: de la tropa, no de los jefes. Los que pisamos el barro y los charcos y cómo y por qué nos cortamos tanto.
De vez en cuando algún compañero me reprende: cómo preguntas eso; a este no le gusta hablar de eso, “ de eso que todos comentamos, cotilleamos y queremos saber” pero yo no estoy aquí haciendo los coros, quiero saber qué pasó, y lo siento es mi trabajo.
Por qué hiciste esto? El otro dice esto de ti ;qué respondes? Hay quien dice que usted no cumple con su obligación? Ya sé que no les gustan mis preguntas, algunas me las pide la empresa y otras se me ocurren a mí. Y creo que es lo que tenemos que hacer.
No somos las coristas de Julio Iglesias ni las señoras que contrataba Berlusconi obligadas a sonreír y a complacer ; nuestro trabajo es darles caña y obtener una información. A todos. No sólo a los débiles y a los que respetan y entienden nuestro trabajo.