Moi local

Na miña empresa cando non quieren cubrir algo din que é moi local.
Pero hai algo local en Galicia? Un lugar  tan pequeno onde os de Vigo van a Ourense á vendima. Os de Lugo van ó Ikea da Coruña. Os de Monforte veñen á praia a Samil.
A todos nos importa todo, porque podemos ir pola mañá ás Cíes e pola tarde á Ópera á Coruña ou de viños á Ribeira Sacra.
Porque todos temos un amigo en Lugo, un curmán en Ourense ou un cuñado na Coruña.Aquí nada é local. Ou é que o local non gusta?. De verdade que é máis local o hospital de Vigo que a Gran Vía?
E agora xa queren retirar a información local; esa que todos sintonizamos a horas predeterminadas. Esa que tanto nos gusta: o tráfico e a temperatura, os eventos da cidá*. A menos dez na miña emisora de referencia.
Esa que escoitamos no coche, na ducha ou ó almorzar.
E quitemos a cultura e poñamos fútbol desas horas como todos os demais.
E enchamos un baúl coas noticias orfas: os de Coruxo sen pediatra, os derrubos de Vilaboa é mil cousas máis

Cerraron nuestro bar

Así sin preguntarnos. Lo cerraron por la cara, sin miramientos. Primero quitaron la terraza, después ocuparon nuestra mesa, la profanaron. Y ahora lo cierran.Adónde iremos?
Ahora entiendo a Sabina, triste, bucólico y lloroso cuando le cerraron su bar.
“ No había nadie detrás de la barra del otro verano”.Pero por lo menos y gracias a la crisis sabemos que el local sigue vacío; ya nunca abrirán un banco.

Un bar y un bolso

Si se puede gobernar el país desde un bar, y si lo puede hacer un bolso; entonces todo es posible.

Un país en shock!

Cuando menos te lo esperas, cuando más narcotizado estás; cuando crees que nadie va a ser capaz de levantar la cortina azul, cuando piensas que la gente traga con todo y le va esta marcha. Es entonces cuando ocurre.
Todo cambia de repente, sin ni siquiera saber por qué!

María Dolores Pradera y Los Secretos - Que te vaya bonito

Cuando es mejor no preguntar

Por nuestra profesión tenemos ese vicio.Cómo, cuándo, por qué, qué. Y a veces las respuestas no nos gustan. Nos dejan alucinados y no las entendemos bien. Por eso muchas veces es mejor no preguntar.

Un corazón tan cinco estrellas

Que no se llena nunca.