Lara me reconoció aquel día que había trabajado para la mafia. Yo ya lo sabía. Lo había intuído mil veces.
Ella sabía cómo funcionaban, cómo medían sus tiempos, cómo tenían que contentar a todas las famiglias.
Algo horrible, la verdad...
Vigo, política, retranca, Casa Real e vida en xeral
No tan horrible si fingimos nunca habernos visto antes. Siempre funciona. Te dejo un beso grande.
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