Carta de San Pablo a los Tudenses

Queridos hermanos en la fe, en el amor y en el pecunio? Estamos aquí reunidos en lo que puede ser nuestra Última Cena para seguir la voluntad del Padre, Jesús y del profeta Juan, autor de las múltiples cartas a los leoneses, en las que hablaba de que no hubo etiología homicida y que en todo caso la muerte no es el final. Entonces para que darle importancia a si la muerte fue casual o causal? No hay más que seguir la doctrina de Jesús, Pescador de otros mares. Él que murió y pagó por nuestros pecados. Y que decía siempre: "perdónales porque no saben lo que hacen" Queridos tudenses espero como siempre que tengáis en cuenta nuestra petición que será siempre recompensada con la gracia divina, con los Dones del Padre como en anteriores ocasiones.