La desnudó como quien desenvuelve un regalo, intentando no deshacer aquellos lazos negros que tenía su ropa interior.
Quitó con suavidad su camisa y su falda cono si fuesen papel de seda o celofán
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Vigo, política, retranca, Casa Real e vida en xeral
Y se retrata en esa acción.
ResponderEliminarTambién soy de las que se toma su tiempo para abrir un regalo sin romper el papel. Cuando se trata de sacar la ropa... tan paciente no soy, no.
Me parece muy bueno el cuento por lo que me invita a imaginar.
Bicos
Quiero más y con la misma delicadeza.
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