El capitán y la gaviota…

Ayer salía de Afundación despues de cubrir los premios Pardo Bazán para la radio y me encontré con una colega del barrio de las de los hijos de Cursillos. Su padre como muchos saltó de Cursillos a otra organización religiosa de más caché. Era algo que daba mucha rabia a Compay si quieres catequizar a alguien o hacer apostolado busca fuera, no vayas a "coger adeptos" a otra organización. Y hablando de esto salió lo de siempre y me dijo no Gaviota no, no es de esa organización, y yo le dije mira creo que sí. Y hablando del capitán y la gaviota no me dijo mucho , me puso cara de horror y me hizo un par de gestos como diciendo vaya personajes de cuento de terror. Que actúan sin miramientos,con mano dura y sin mirar atrás. Todo eso me transmitió sin casi decirme nada. Es el poder evocador de las elipsis. Ella misma había vivido en el mismo edificio de Rosalía que la gaviota patipequena.